Empecé a quererme más y llorarte menos.
Aprendí a preocuparme menos y sonreír más.
Comprendí que la vida no está escrita en ningún lado,
y que las circunstancias cambian como una tormenta cambia la dirección del viento.
y que las circunstancias cambian como una tormenta cambia la dirección del viento.
Entendí que hay personas necesarias,
pero sólo una indispensable, y esa soy yo.
pero sólo una indispensable, y esa soy yo.
3 comentarios:
Genial!!!!1 me encanta, me encanta, me encanta que pienses asi!!!!!!! exitos mujer. Tengo que hbalar contigo, asi q si te veo conectada o me ves chiflame.
Después de casi un año vuelvo a comentar en un blog, no se es como que son palabras que podrían ser mias... algo tienen... me gustan
Abrazo muchacha...
Coincido
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